Hola a tod@s:
El reciclaje da sus frutos, creedme. Ya sé que pensáis que estoy mal de la cabeza. Tenéis razón. Lo único que me preocupa es acabar con síndrome de Diógenes, pero puesto que de momento soy capaz de encontrar las cosas creo que aún tengo salvación.
¿Os acordáis de que os hablé de que estaba haciendo un proyecto grande? Bueno, pues en este proyecto se cosen muchos triangulitos. En realidad se cosen cuadrados por la diagonal y luego se cortan las esquinas que sobran. Creo que es una técnica que llaman "diagonal-corners". En mi opinión se desperdicia mucha tela pero como era el primer proyecto de este tipo decidí seguir las instrucciones al pie de la letra.
Mientras trabajaba recordé una técnica para coser triángulos a pares y probé a usarla pero no salió bien así que tuve que resignarme a cortar las esquinitas sobrantes y tirarlas.
¿QUÉ? ¿TIRAR? Ni en broma. Eso en mi taller no pasa. Hasta las tiras más ínfimas se guardan en el bote de relleno (otro día os hablaré de él). Y puesto que este proyecto acarrea un montón de restitos decidí guardarlos "por si acaso".
Me tomé la molestia de ordenarlos un poco.
¿Entendéis por qué os digo que no sirven para mucho? La verdad es que son muy pequeños. Pero todo es cuestión de echarle imaginación.
Es un diseño gratuito de Jennifer Ofenstein que podéis encontrar en Fandom In Stitches. Si esto no fuera un blog público le dedicaría algunos epítetos poco cariñosos al bicho en cuestión. Algunas de las piezas son increiblemente pequeñas pero tenéis que reconocer que es una monería una vez acabado. Vale, no está acabado, que le faltan los bordes, pero ya me entendéis. Tal y como está mide 13cm de lado.
¿Qué vamos a hacer con este dragón? Habrá que buscarle amiguitos, ¿no?
Pasadlo bien.
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